viernes, 24 de febrero de 2012

Mis besos



En la trenza de tu pelo
Esondí mis besos
Que se enredaron y arrugaron
Entre las curvas del peinado
Cuando fuiste a dormir
Y te soltaste el pelo
Todos los besos salieron volando
Y se repartieron por el mundo
Para los huérfanos, débiles y solitarios

Poema manchado de lágrimas

Te regalé
La orquilla de mi pelo
Las piedrecitas
De colores
Brillaban entre
Tus manos
Ahora lucen negras
Sobre un fondo metálico
Te entregué
Mi corazón
Y mi cuerpo
Para que en las
Noches de invierno
Te diera calor y calma
Te regalé un ajedrez
El día de los Enamorados
Y era feliz...
Bailando sin corazón
Alrededor de un  hombre
Cuyos besos
Eran tibios
Como pétalos
Recien secados
Al sol
Pero se me escapó
Como el niño que echa a correr
Y ya no se le encuentra
Llevándose mi corazón
No habrá siguiente
Mi amor se ha quedado contigo
En la cajita metálica
En tu armario de madera
Y donde quiera
Que guardes mi corazón.


Mis manos vagan solas en autobuses llenos de corazones felices.

jueves, 23 de febrero de 2012

Para ti, que me esperas en algún lugar

Herida
Mi piel derrama sangre
Tragada
Por las fauces
De aquel que no se deja ver
Busco la belleza
Para curarme
Pero todo es tan feo
No cuento con la mano de nadie
El abrazo del Sol
Es tierno
Y me adromece
El susurro de coches lejanos
Hace que sienta
Que la ciudad se mueve
Y yo,
En mi rincón
Pisando arena
Con los pasos del gigante
Acechándome
Suplico que todo cambie
Y, que algún día,
La brisa traiga consigo
Amor y alegría
Y nos emborrache de bondad.

miércoles, 22 de febrero de 2012

Pobre María

No te hace falta sonreir, María
Esa sonrisa tuya
Ya se la llevó el tiempo
De cuando el niño era pequeño
Y le comprabas bollitos de chocolate

¿Dónde está tu sonrisa, María?

Se te quedó pequeña
Y ahora la visten las mariposas
De tu vestido
Que sí es alegre y de vivos colores

Desentona con tu mirar
Con tu tez marchita
Con tus labios serios

La sonrisa de María
Se la tragaron unos montruos
Que nunca la quisieron
Porque María es buena
Y los monstruos ya sabemos que son malos

Pero no te preocupes, María
Dios está al lado de los que sufren
Y tú sufres mucho.


Sonríe