lunes, 25 de junio de 2018

Tu amor es de color azul

Oh, mi amor
Estoy tan loca por ti
Oh, mi amor
Y en mis sueños siempre
Apareces tú 
Pero creo que dejaré esa droga
Y no permitiré 
Qué vuelvas a hacerme daño
Oh, mi amor
Pero te echo tanto de menos 
Y verte es tal regalo
Que me hace volver a sentir
Ese pasado
En el que a tu lado
Fui feliz
Oh, mi amor
Cuanto te odio
Por lo que me hiciste perder
Oh, mi amor 
Y aún así lo permito
Y no te guardo rencor
Porque me hiciste aprender


Un amor como el tuyo, baby, me vuelve loco, no lo puedo evitar. No creas, ni pienses jamás que por aquel daño dejaré de quererte menos. Un amor como el tuyo, chica, me hace sentir estallar. Creer que los pájaros me hablan y las niñas de la comba me dedican canciones, mientras desde mi banco, no sé si contestar a los pájaros o dar las gracias a las niñas. Y es doloroso, nena, jamás pensé que llegaría a tal límite por un amor como el que tú me das. Cuando miro la única estrella que puedo ver a través de mi ventana y recuerdo tu despiste tan natural. No creas que tus defectos me harán desistir o quererte menos porque nena, escucha esto : te querré aún más. Es como la hormiga que le pide a la cigarra su guitarra y que la dejen cantar de una maldita vez. Tu amor me vuelve loco. Una niña como tú no debería estar condenada a estar sola. No viste a tiempo la señal de stop y seguiste conduciendo hasta casi caer por el barranco. Creo que ya me has vuelto loco para siempre y me sonríes, dándome la bienvenida con tu mirada, como si nada hubiera ocurrido y no quiero pensar que eres una descarada pero es que es más que eso también eres una pícara deslenguada. No me pidas lo que no tengo se consecuente con lo que cuentas y, a pesar de todo, cuéntame a mi entre tus céntimos. Un lustro, a veces, se pasa como un minuto. Cinco años de locura a pesar de disimular me llevaron hasta tu ventana para lanzarte miles de improperios esperando que alguno de mis dardos alcanzara tu corazón. Porque me hiciste mucho daño, baby, porque me volvió loco tu amor y permanezco loco, loco por ti amor. Pierdo el compás de mis pasos si, a lo lejos, te veo aparecer y empiezo a ser como ese loro al que su maestra solo le enseñó a decir  "Te quiero" y lo repite una y otra vez. Porque, de alguna manera, creo que alguien lo escribió en la arena de una isla desierta. A veces, creo que soy un náufrago y tú una sirena. No vuelvas a cantar esa canción que ya censuraron y retiraron del mercado para evitar daños permanentes en el cerebro provocados por tu amor porque un amor como el tuyo, baby, puede hacer enloquecer. Es como esa hormiga que se cansó de "coleccionar" miguitas de pan que ni siquiera Le servirían para dejar su rastro en caso de que se perdiera porque perder, ya se hallaba pérdida y le pidió la guitarra a la cigarra para poder cantar al Sol todo el día. Es como chocar los cinco a las puertas de un casino mientras pactamos con Satanás. Es como no ser creyente y santiguarse de rodillas igual. Es el antojo que se escondió en mi nuca y te hice encontrar cuando me cortaste el pelo de mostrándote así que no hay secretos para ti. Y no creas que tus defectos me harán quererte menos sino aún más. Por siempre tuyo. Por siempre mía. Por siempre jamás  Porque tienes el poder de volverme loco, nena. Porque tu amor me hace estar loco y eras tú la que tenías que haber caído y en tu columpio sigues rozando las estrellas con tus botas dando patadas si quieres al inmenso Universo de donde debes proceder. Pero tu amor es una locura, baby, ese despiste tan natural. Esa cara de no haber roto nunca un plato cuando te cargaste las tres vajillas de un ajuar. Nena, quizá tú también estés loca pero no te rindas jamás.

Puede que pienses que soy un tipo raro o mayor para ti, quizá creas que soy de otro planeta y me lloras en silencio que te saque de aquí. Es como el loro que aprendió a decir "Te quiero" y no puede mas que repetirlo una y otra vez. Es como la hormiga que se cansó de recoger miguitas de pan y herida como un demonio prefirió bailar y cantar al son de la cigarra. Y te quiero, nunca lo olvides. Es como un regalo sin empapelar, en bruto, solo hay que limar. Es el lastimoso ronroneo que se le escapa al gato antes de que su cascabel termine de sonar. Y ya podemos penar, como reír, como soñar. Y si soñamos despiertos, cariño, es que entre sábanas aún seguimos y tu "qué más da" penetra mis oídos y me hace reír de gozo como hace un rato también te metiste dentro y me sucumbió el placer. Por eso, vida mía, no temas, no temas si vuelves a caer. No temas en ofrecer la misma manzana una y otra vez. Es como la hormiga que se cansó de "coleccionar" miguitas de pan, cruzó los dedos tras mi caballo y te ofreció mi perfecta sonrisa, mi fingida sonrisa, lo que no podía imaginarme, baby, es que tu amor me volvería loco, así  tan naturalmente y sin prisa. Loco, loco. Loco tras tus piernas, loco por morder tus labios cereza. Y, cariño mío, eso es precisamente lo que ignoraba  Tu amor es un laberinto oscuro en el que nunca ves la salida, tu amor, mi vida, es una maleta de rapidísimas tortugas y cómo decirte que fuiste tú quien me volvió loco, cuando en sus mentes la presa eras tú. Nena, te quiero tanto que miles de agujas clavadas en mi piel no me harían daño, que si lloro sangre no me asustaría, mi vida, porque he perdido la cabeza, he perdido la cabeza por ti. Tú te levantas, te sientas y te vuelves a levantar, como la canción que de pequeños nos cantaban a los dos pero cuando duermes se acabó el frío y el calor, se olvidan las malas experiencias del día, el zumba de algún mosquito no te molesta. Por ello, duerme pequeña y déjame descansar a mi porque sino de locura puedo morir. Y tú también estás tan loca, cariño... me juras en la iglesia que todo es mentira mientras te santiguas en la pila del agua bendita. Enciendes una vela y me aseguras que todo es una película y que tú eres la protagonista. Mientras tu espeso y largo cabello se mueve al viento al compás de tu falda recien salidos de la catedral  Me coges la mano y me susurra al oído que tenemos que interpretar bien nuestro papel. En la fachada de la iglesia unos cuervos parecen estar furiosos por nuestros besos y echan, agresivos, a volar todos de una vez. La cigüeña parece más grata y en el campanario han tocado las tres mientras te besaba, mi querida, mi pobre amada. Tienes el poder de volverme loco, por favor, ahora que lo sabes, no juegues conmigo otra vez, podría quemarnos el diablo de nuevo, podría ser lo que nunca podría ser porque no está escrito, cariño y lo siento porque nos encontraremos dentro de siglos y siglos a la salida del laberinto.

Tú cervatillo, yo un caballo. Trote os y riámos mientras nuestras vidas van a desembocar a un inevitable mar. Tan despacio como tan rápido. Es el secreto de nuestra infancia lo que nos permite seguir. Es sufrir siendo niños, recoger flores y correr por el prado camino a la casi ta del árbol. Y te odio y te quiero. Y te quiero y te odio y, en esa ambivalencia  algo enciende la pasión. Como un demonio herido siempre que se bifurque el camino torceré por el lado izquierdo. Me volviste loco, cariño, confundía las bolsas de basura con ratones gigantes y pensé que el grano de pimienta del sándwich era un botón con el que podía atragantarme  Me engañas te pequeña y así, tan pequeña te saliste con la tuya como siempre mientras yo practicaba las matemáticas para no olvidarme de contar y mientras tú, tan divertida, saltaba a la comba y hacías pompas con tu goma de mascar. Me vuelves loco, baby, no puedo más  Abres las puertas de los trenes cuando el viaje está a punto de empezar, te saltas los semáforos porque quieres una chaqueta de cuero para la que no tienes dinero y pretendes que yo te pueda robar. Un día vas a prender fuego a este infierno y como infierno ya qué más da.

Tu amor me vuelve loco, cariño, así tan naturalmente y sin prisa.

Y tu amor me volvió loco, loco, loco, totalmente  ya sin solución sin un atisbo de luz a la que agarrarse y trepar. Y estoy loco por ti, nena, dime de qué manera si permaneces ausente todo el día. Estoy loco, pequeña, loco por tu amor totalmente y ya sin solución  y me parece escucharte en este momento decirme en silencio "sí  así también yo lo haré"

Está por encima de secretos y mentiras. Cómo te sientes? Está por encima de un olvido o de un no querer saber.
Es tu dulzura, la fragilidad que te atreves a mostrar, es tu dulzura, es tu gracia al caminar. Estoy loco, loco y no me queda más remedio que confesártelo, baby, estoy loco por tu amor. Es tu amor lo que me hace estar así, tan pronto llorar como reír  Es tu amor lo que desequilibra mi mente, la línea de mis latidos y me hace confundir la bolsa de la basura con un enorme gato. Mientras me foto la barbilla decido qué hacer contigo, nena, pero ganaste el juicio, y aunque quiera escapar me hayo preso de ti. Estoy loco, nena. Loco por ti. Y ya que esta noche me has dado la bienvenida con tu mirar te pido que tengas piedad de este pobre loco que se conforma con las migajas de tu forma de ser, que no pide ni conversación ni palabras solo esa droga a dosis pequeñas que solo tú eres capaz de darme. Que ya nunca te dejaré de amar, sea mentira o verdad. Permanezco atento a todo lo que me cuentas pero confundo lo que me dices, nena. No importa. Quizá la culpa de todo solo la tenga el idioma.

Ahora piensas que me convertí en tu musa inalcanzable, ser mitológico allá, tan arriba hasta para el más alto, en el Universo, nena, sigo loco por ti.
Nena, deja ya ese juego. Es cruel, es malvado, nena choca los cinco con ese rubio de ojos azules que parece estar en tinieblas.
Quise aprender a tocar la guitarra pero tuve que gastarme hasta el último centavo en siete cartones de cigarrillos. Si te parece una buena oportunidad, cógela y vete. No me faltó tabaco durante todo el mes pero me costaba sonreír en el defecto de mi ignorancia que tantas veces me ha hecho como una niña ante la pompa de jabón más tonta reír a carcajadas. Y reír y reír mientras él mundo se muere de hambre, mientras se descongela el Polo Norte, mientras una mujer de pies a cabeza es vestida para luego ser quemada a manos de su marido. Y reír y reír a carcajadas con mis burbujas de jabón las que, de niña, mi madre nunca me compró  Y reír y reír mientras él vuelo cae en picado. Demasiado alta fue la subida, mucho peor será la bajada. En mi tiempo libre sueño contigo despierta, en mi sufrimiento de mañana, tarde y noche. En mis ratos libres que abarcan las veinticuatro horas del día me gusta soñar contigo mientras intento dedicarme a otra cosa. Hasta que no tuve a mi hijo no dejé de ser la protagonista de mi propia vida y ahora tú le has suplantado abarcando cada segundo de mi existencia en mis sueños porque enseguida, nada mas despertarme, me adormezco. Y pienso que algún día la noria parará para que así bajes y vengas a visitarme un ratito. Mi querido, mi odiado príncipe azul. Y el vuelo cae en picado mientras me he enamorado de mi padrastro con tan sólo doce años y tengo que dormir bajo cartones, caliente por el vodka que él mismo me ha dado a beber por si mi madre se entera... y con estos pantalones de hombre que me vienen grandes frente al espejo de cualquier escaparate. Al día siguiente ya no es que me sienta, es que ya no soy yo y hacer el símbolo de la paz a las musarañas es como resucitar a Santa Teresa de Jesús o el nombre de Marisol en los periódicos, es como traer de vuelta a un muerto que se cansó de dar vueltas, es como ir dando tumbos y acabar tumbado en el piso. Es como nacer en España y que nadie sepa que, en realidad, eres americana. Es como escribir miles de páginas para llenar almas y que tus bolsillos sigan vacíos. Es como trabajar de sol a sol con la camisa raída a rayas por un mísero sueldo mientras la chimenea de la fábrica vomita humo tú fichas dando parte a tu compañera de la indecencia de turno de los que creen serlo todo sin tener siquiera aquello con lo que todos nacemos. Vine desnuda y desprotegida a este mundo y así permanecí y seguramente así moriré si la moneda, al lanzarla, no quiere darme la cara de la suerte.

Y jamás pensé que podría volverme tan loca. Todo tiene su límite, baby, es cierto, no te lo niego, pero es que jamás pensé que podría ser tan feliz así. Las pastillas que me ofreció mi doctor contra la locura no hacían más que molestarme dibujándome una sonrisa idiota en mi rostro continuamente y, ahora, cariño, no sé si estaré loca pero tampoco dejo de sonreír y mi sonrisa es valiente. Echa un pacto con Satanás acompañada por tu querida madre y vete riendo y bailando por las calles a casa. Tu falda de vuelo alcanza el cielo mientras la policía reza por ti en su santuario de patrullas con luces y sirenas. Hay miles de ellas olisqueando las calles y tú, con tu bondad, has cometido el delito más grande y vas riendo, tirando de las esquinas de tu falda de vuelo mientras hasta la policía reza por ti y allá arriba un ángel baja para darte las gracias, las gracias por hacer un pellizco al mundo, un sitio en tu rincón, por ser tú  por hacerlos felices, que tan pocas veces lo son.

Y nos empeñamos en ser crueles el uno con el otro, una y otra vez.

Porque no hayo la salida, cariño a no ser que tú me ayudes. Por favor, sacude las escobas que tú misma compraste y no salgas volando encima de ellas por la ventana sin avisar, como quien pisa el acelerador y no vuelve más. Los recados están cerca pero el Universo es infinito. Sacude las escobas y ten piedad de mi porque aunque creía que tenía todas las de ganar me volviste loco  baby. Loco de remate otra vez. Tu amor es para volverse loco, eres como un peligro público que se camufla con minifalda y gafas de sol. Eres un peligro público para cualquier hombre pero vas con todas las de la ley. Segura de tus pasos no puedo más que volverme loco, chica. Loco por ti. Eres un peligro público para cualquier hombre de a pie.

Puedo jurar, apostar y acertar a que pensaste "se convirtió en mi musa y nada más". No tienes ni idea, chica, de lo que en mi puedes provocar.

Ahora te digo :

Ten cuidado, baby
Si sigues volviendo loca
A más gente
Te considerarán 
Un peligro público
Agudiza tus sentidos
Chica
No vaya a ser
Qué un día 
Decidan arrestarte
Y retirarte
De la circulación
Eres la única droga
A la que no supe
Decir "no" 
Y nada me sacia
Si me faltas
Día y noche
Me siento vacio
Me volviste loco
Amor
Tu síndrome de abstinencia
Al no poder beber de tu licor
Casi me mata
De locura
Mi querida
Mi querido amor
Ahora 
Mi diagnóstico es crónico 
Baby
Y tú 
Te ríes a carcajadas 
Con una amiga
Mientras dibujáis
Un corazón en la pared
Tendré que hacer caso
A mi doctor
Cuando me recomendó 
No tomar
De tu medicina
Y estoy loco, 
Me volviste loco, 
Amor.