Mi pequeña, como odio verte feliz. Qué te ilusiona tanto? Pareces tan segura de tus sueños, persigues estrellas fugaces qué haces tuyas. Por qué siempre se cumplen todos tus deseos?
Mi pequeña, como odio verte realizada, pero sé que no podrás, caerás una y otra vez. Trataré de ocuparme, mi deseo más dichoso que tú llamarás, con tu cabecita llena de diamantes, "maldad".
Conseguiré que nadie te crea, que nadie te quiera, que no tengas ni un solo hombro sobre el cual llorar. Mi pequeña, mía, yo te presto mi hombro, soy tu única amiga, en la única que debes confiar, a la que siempre debes acudir.
Tus derechos son el "no" de un mañana. Mientras viva haré lo posible, incluso más allá de mi propia realidad. La culpa es tuya, siempre es tuya.
Mi pequeña, como odio verte joven y bonita. Ilusionada con tus canciones y tus letras desprendidas de tu diadema en tu agenda. La preciosa diadema que yo misma he elegido especialmente para ti.
Siempre estarás abatida, como odio verte feliz, como odio esas miradas, como odio verte en manos de tu mejor amigo, de tu nuevo novio. Parece ir en serio. Pero no podrás, él no podrá.
Soy la única, la única en quien debes confiar.
La taza de café más bonita es para ti, limpiada con mimo y amparo, derramaré un café mágico hecho especialmente para ti. Entonces, en las noches, verás hadas y duendes junto a tu cama y así, así no podrás marcharte jamás. Porque te odio, porque persigues tus sueños y los haces realidad.
Pero ya no podrás escapar más. En tu preciosa taza de café está ese regalo que tanto esperé y nunca me atreví a utilizar. Duerme tranquila, bonita mía, por entre nubes, deslizándote por los toboganes de luz. Si vuelves serán los ángeles los que se ocupen de ti.
Lorena Caballero Ortega.
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Besos a todos 😘😘😘
