viernes, 30 de marzo de 2012

"Me robas la mirada cada vez que te desvistes y te vuelves a vestir"

Porque sé que te gustan
Se va poniendo el sol, poco a poco, por el oeste, en este atardecer amargo. Pensé en una posibilidad tras tus ojos de caramelo que guardara para mi un millón de besos. Tan equivocada estaba y una lagrima me hizo cosquillas mientras en el licor dulce buscaba el reposo a tan descontrolados sentimientos. Y ahora, te has ido y yo sigo enamorada... Tu música, tu guitarra, tus agendas... son trocitos de aquel que me dio a beber su corazón y yo fui tan tonta que derramé todas las gotas. Me dio tanto por tan poco. Y yo era ciega y manca y coja y calva. No podía verlo, cogerlo, pisarlo, acariciar con mis cabellos... y lo perdí cuando por fin comprendí que había sido un amor verdadero. Quise matarte, te odié y nadé en un mar contaminado con venenos y amarguras hasta que después de los latigazos una caricia me devolvió la cordura. Fueron ellos, los sabios. Les debo tanto. Y ahora, después de ver más allá de mi ombligo, de observar y comprender a aquellas personas que me han querido tu dices que ya no me quieres. Puedo hacer dos cosas o destruirme o renacer y hago un poco de cada una en determinados momentos. He de decidir aunque si tuviera que elegir algo no sería más que aquel que me roba las miradas y sonríe, a pesar de todo sigue sonriendo. Gracias.

lunes, 26 de marzo de 2012

EL gusanito malo

Un gusanito me picó un día
Era un gusanito travieso
Que me inyectó veneno
Me curé la herida
Con agua y sal
Y el veneno me hizo dormir profundamente
Durante meses
Cuando me desperté
Vi unos ojos enormes
De niño triste
Y entonces
Me propuse hacer
Todo lo que estuviera en mis manos
Por ese niño
Que me había esperado
Tanto tiempo
Una voz dentro de mi cabeza dijo
"Estás curada"
Y el gusanito no volvió a visitarme jamás.