viernes, 24 de febrero de 2012

Poema manchado de lágrimas

Te regalé
La orquilla de mi pelo
Las piedrecitas
De colores
Brillaban entre
Tus manos
Ahora lucen negras
Sobre un fondo metálico
Te entregué
Mi corazón
Y mi cuerpo
Para que en las
Noches de invierno
Te diera calor y calma
Te regalé un ajedrez
El día de los Enamorados
Y era feliz...
Bailando sin corazón
Alrededor de un  hombre
Cuyos besos
Eran tibios
Como pétalos
Recien secados
Al sol
Pero se me escapó
Como el niño que echa a correr
Y ya no se le encuentra
Llevándose mi corazón
No habrá siguiente
Mi amor se ha quedado contigo
En la cajita metálica
En tu armario de madera
Y donde quiera
Que guardes mi corazón.


Mis manos vagan solas en autobuses llenos de corazones felices.